Cross-Selling, o venta cruzada, es una técnica de ventas en la que un vendedor intenta vender productos complementarios o relacionados a un cliente que ya está comprando otro producto. Este enfoque no solo aumenta el valor de la compra del cliente, sino que también mejora la experiencia del cliente al ofrecerle productos que potencialmente satisfacen sus necesidades adicionales.

Una estrategia efectiva de Cross-Selling requiere un conocimiento profundo de los productos y de cómo se relacionan entre sí. También implica comprender las necesidades y preferencias del cliente, lo que permite al vendedor hacer recomendaciones personalizadas y pertinentes. Por ejemplo, un cliente que compra un teléfono móvil podría estar interesado en comprar una funda protectora o unos audífonos compatibles.

El Cross-Selling puede ser especialmente poderoso cuando se combina con un CRM eficaz y análisis de datos. Al analizar el historial de compras y las preferencias de los clientes, las empresas pueden identificar oportunidades de venta cruzada y dirigirse a los clientes con ofertas relevantes en el momento adecuado. Esto no solo aumenta las ventas, sino que también refuerza la relación del cliente con la marca, ya que percibe

También puede aplicarse, por ejemplo, en carritos de compras en línea, donde al agregar un producto al carrito, el sitio web puede ofrecer alguna opción relacionada que el cliente pueda agregar fácilmente a su orden, incrementando el valor de cada compra.